Todos hemos oido alguna vez el refranero popular...
Los de abril para mi, los de mayo para mi hermano y los de junio para ninguno.
Pues eso que como es abril no podemos dejar pasar la ocasión de comer esparragos frescos. Lo primero es ir a comprarlos... sino tienes la suerte de tener un hortelano de confianza tienes que ir obligatoriamente al mercado y allí puedes encontrar de todo... Lo mejor es que se hayan recolectado ese mismo día, aunque soy consciente que no es fácil en todas partes de España. Asi que guiate un poco por tu buen ojo, para elegirlos.
Yo suelo comprar esparragos entreverados.... son unos esparragos que no son tan blancos porque ya les ha dado algo de sol. Para mi son mejores que los blancos pues tienen algo más de sabor. Atrevete a probarlos y luego me cuentas....
Si los compras directamente al agricultor te va a tocar un poco más de limpieza pues vienen con más tierra pero siempre tienes la garantia de que sean más frescos.
Despues de enjuagarlos bien tienes que pelarlos para ello cogemos el esparrago por los estremos y doblamos hasta que rompa, esa es la parte tierna del esparrago, luego con un cuchillo o un pelador solo nos queda pelarlo en la parte de abajo... cuidado con las puntas pues son frágiles.
Ponemos los esparragos en una perola con agua y sal y los ponemos a cocer... entre 10 y 20 minutos segun el tamaño de nuestros esparragos...
Luego solo nos queda acompañarlos como mejor nos apetezca.
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